lunes, 1 de febrero de 2010

El cerrajero

Tengo todas las llaves, todas, el universo es todo mío, tengo el acceso a todo lo imaginable, a lo tangible, a lo insustancial, no soy Dios, pero tengo todo su poder, todo está en mi llavero, y mi habitación tiene grandes candados de los cuales sólo yo tengo llave y copia; sé que he de morir en ese cuarto que se incendia desde adentro mientras me quedo ciego buscando la salida bloqueada, sé que extravié las llaves de tu pecho, ah, cómo me gustaría quedarme a morir entre tus senos, que las costillas fueran las rejas, y tu sangre mi caricia, en cambio de eso tengo todo el universo, infinito, una cárcel en la cual soy el preso y el carcelero, deambulando entre barrotes de donde surgen caras y brazos, donde nos buscamos sin encontrarnos, porque desconocemos nuestro propio rostro, nuestra propia sed, que es la misma a la del otro, que se devora vivo, y nos devora a todos.

3 comentarios:

Jeimmy dijo...

this is tne end, beautiful friend
this is the end, my only friend
the end
it hurts to set you free
but you´ll never follow me
the end of laugher and soft lies
the end of nights we tried to die...

Jeimmy dijo...

Yo sin palabras y en el vuelo
de la leve paloma incauta
tu voz en tránsito sigue
y es en el tiempo de la flauta

Amo el silencio de tu alma
tu tranquila fuerza serena
tu rostro niño sostenido
por firme vara de azucena

Eres no mas ligera sombra
y te quiero, y te quiero
porque adoramos lo que pasa
la rosa, la nube, el día

Amo la miel de tus palabras
tu beso ardoroso, sabio
donde aprendí que la dulzura
cabe en el mundo y en tus labios

Te amo, te amo como se aman
las bellas cosas encendidas
el lirio vano, las canciones
la sangre nueva de la vida

Jeimmy dijo...

Llueve un poco de sal,

Algo de arena,

Llueve tu sonrisa, tu pereza

Moja mi soledad y mi tristeza

Humedece aquellas caricias furtivas

Aquellas miradas nada esquivas

Llueve tu olor, sabe a café

Olor que encolerizaba mi piel

Suavizaba mi existencia

Y tranquilizaba mi alma

Huele a tus palabras

Simples y certeras



…Como dormitan aún en mi almohada